Intel dice que los semiconductores serán una parte importante del precio de los coches en diez años

Escrito por Guillaume
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Aunque Tesla ha popularizado un sentimiento geek para los coches del futuro, el fenómeno de la "electronificación" de los vehículos afecta a todos los fabricantes.

El lanzamiento de los primeros coches Tesla supuso la introducción de un gran número de componentes "informáticos" en los coches, con, por ejemplo, la desaparición de los clásicos instrumentos del salpicadero, sustituidos por un único e impresionante monitor de pantalla plana. De la misma manera, un Tesla no se vende sin su aplicación para smartphone, que no es del todo imprescindible, pero proporciona tantos servicios que es imposible prescindir de ella. Como decíamos en la introducción, el fenómeno está lejos de limitarse a Tesla y está creciendo con la adopción masiva de coches híbridos/eléctricos por parte de todos los fabricantes.

Como prueba de esta "dependencia" de la electrónica, hace unas semanas Toyota se vio obligada a anunciar una fuerte caída de su producción de vehículos: la culpa de la escasez de semiconductores que sufre la industria mundial. Para que la escasez de semiconductores provoque un descenso del 40% en la producción de automóviles en la empresa número uno del sector, la electrónica debe haberse convertido realmente en un componente clave, sin el cual toda la industria automovilística está paralizada. De hecho, este es el punto del último discurso de Pat Gelsinger, que - por supuesto - está predicando al coro. En su calidad de director general de Intel, es evidente que le interesa presentar los semiconductores como un elemento clave de los vehículos del futuro, pero las cifras que presenta hablan por sí solas.

Por ejemplo, según un estudio realizado internamente por Roland Berger y McKinsey, Pat Gelsinger afirma que hace dos años los semiconductores sólo representaban el 4% del coste del hardware de un coche "medio". El jefe de Intel señala que esto es cada vez más importante, como explicamos anteriormente, y que para 2025 esta proporción debería aumentar al 12%. Por último, para 2030, Intel predice que el 20% del coste del hardware de un coche corresponderá únicamente a los semiconductores: una quinta parte del coste total del hardware de los coches en 2030. Si las predicciones de Intel son correctas, habrá que encontrar una solución -y rápida- a la crisis del mundo de los semiconductores: no una crisis financiera o de demanda, sino una crisis de suministro que provoque una escasez múltiple.